A nuestro buzón ciudadano llegó un texto en el que se señala que ayer en las instalaciones del CETIS 93 se dio un hecho violento en el una joven estudiante estuvo a punto de lesionar a una compañera con un arma punzocortante; hasta el momento la institución educativa no ha hecho ningún comentario al respecto.
A continuación reproducimos el texto que nos fue enviado.
Ayer por la tarde, el Cetis 93 se convirtió en el escenario de un alarmante intento de homicidio entre dos estudiantes de la institución. Según testigos, el incidente fue resultado de años de acoso escolar que una de las alumnas había estado sufriendo a manos de otra compañera; finalmente, la víctima del bullying se hartó de la situación y, en un acto desesperado, intentó apuñalar a su agresora con un arma blanca punzocortante.
El violento suceso fue interrumpido gracias a la rápida intervención de un maestro que logró arrebatarle el arma a la estudiante, evitando así una tragedia mayor. Sin embargo, lo que siguió después ha desatado una ola de indignación entre los padres y la comunidad escolar.
En lugar de tomar medidas para abordar el problema de raíz, la institución optó por ocultar lo sucedido y expulsar a ambas alumnas, negándoles el derecho a la educación. Esta decisión no solo ha sido criticada por su dureza, sino también por la aparente falta de voluntad de la escuela para reconocer y tratar adecuadamente los problemas de acoso que llevaron a esta situación extrema.
Este medio ha obtenido declaraciones de una de las partes involucradas, quienes nos han contado en detalle lo que ocurrió y cómo la administración del Cetis 93 intentó encubrir el incidente. Mientras tanto, la institución educativa se ha negado a dar declaraciones, manteniendo un hermético silencio ante los hechos.
Este caso plantea serias preguntas sobre la seguridad en las escuelas. Como padres, confiamos en que nuestros hijos estarán a salvo cuando los dejamos en las aulas, pero eventos como este demuestran que, a veces, la realidad es muy diferente. ¿Cómo es posible que situaciones de este tipo pasen desapercibidas hasta llegar a un punto tan crítico? ¿Qué medidas están tomando las instituciones para proteger a nuestros hijos de la violencia escolar?
Este es un tema que no puede ser ignorado. La comunidad exige respuestas y, sobre todo, acciones concretas para prevenir que una tragedia de este tipo vuelva a ocurrir.