Durante una visita a la frontera, Marco Bonilla sostuvo un encuentro con productores del campo, ganaderos y agricultores del Valle de Juárez, quienes expusieron la complicada situación que enfrentan a raíz de la desaparición de programas federales de apoyo.
Los asistentes señalaron que desde hace siete años dejaron de operar esquemas fundamentales como Procampo, el subsidio al diésel y la prima del seguro agropecuario, lo que ha puesto en riesgo el patrimonio de miles de familias que dependen de la agricultura y la ganadería.
En la reunión también manifestaron su preocupación por el cierre de la frontera para la exportación de ganado, derivado de la falta de acuerdos y diálogo entre los gobiernos de México y Estados Unidos. Según los productores, esta situación ha afectado directamente a quienes han invertido tiempo, esfuerzo y recursos en la consolidación de sus hatos.
Bonilla escuchó de manera directa cada una de las inquietudes planteadas y refrendó su compromiso de mantenerse cercano a quienes trabajan la tierra y generan alimento. Subrayó que la fortaleza de Chihuahua radica en el esfuerzo de su gente y que es necesario dar voz a quienes sostienen al sector primario.
Al cierre del encuentro, los anfitriones hicieron un llamado a la reflexión sobre la calidad de vida en la región: “Queremos vivir en Juárez como se vive en Chihuahua capital, o queremos vivir en el estado como se vive en Juárez. A eso llamamos a reflexionar”, enfatizaron.




